Perspectiva de la Vida

Hace unos días hablaba con un amigo de lo que es realmente importante en la vida, ya que para algunos lo importante va desde: tener una familia, un carro, una casa, un buen trabajo, un buen sueldo, una pareja estable, hasta cosas como: guiar una iglesia, tener un grupo familiar, pertenecer a una iglesia, lo cual en lo particular, me parece genial y una manera muy importante de darse un impulso de inspiración para tener metas que alcanzar. Nos esforzamos demasiado en tener estas cosas que nos traerán satisfacción, que dirán por nosotros que somos personas exitosas.

Esto me recordó de algo que una vez leí en un libro llamado “Las 7 Leyes Espirituales del  Éxito” escrito por Deepak Chopra (el cual es un budista muy reconocido. Ya se que algunos van a decir: y qué hacés leyendo libros budistas! La respuesta es: nada en particular, solo leyendo) que parafrasearé: Las cosas materiales solo son señales del éxito, no el éxito en si, porque si nosotros somos lo que tenemos (un buen carro, casa, dinero, esposa/o) si nos lo quitan, ¿Qué somos?  Esto me hizo pensar en algo que es cierto y que muy pocos valoramos: Nosotros no somos lo que tenemos ni lo que hacemos, sino algo más profundo.

Es tan importante que luchemos por alcanzar sueños, lograr metas y tener cosas, pero es más satisfactorio cuando todo lo que tenemos es resultado de lo que somos y no de lo que sabemos o hacemos, pero es más satisfactorio cuando todo eso es resultado de lo que somos. Es tan difícil, en este tiempo, que se premie a una persona por lo que es, porque son cosas intangibles, cosas que no vemos y que solo al conocernos se pueden echar de ver, es más, es muy difícil que se reconozca a gente con un alma linda, es más fácil reconocer a alguien que hace buenas obras.

Estamos capacitados para ejercitar, cambiar y aumentar las cosas que tenemos, pero no lo que somos, porque no sabemos cómo, no sabemos de donde viene eso, creemos que con lo que hacemos ya somos algo, cuando es todo lo contrario. Tenemos deseos y eso nos hace tener la voluntad para realizar cosas, y estas cosas son las que quedan para la eternidad, la mayoría podemos entender eso pero para saber quiénes somos, debemos de saber: ¡ QUE NOS MUEVE A HACER LAS COSAS! Ese deseo profundo dentro de nosotros es lo que nos diferencia de los demás, es por eso que solo algunas personas sobresalen del resto, solo algunas personas son lo que predican con la verdad, solo algunas pocas personas alcanzan a trastornar el mundo, las que convencen, no por sus palabras, no por sus logros, sino por lo que tienen dentro de ellos, eso que los impulsa, que inspira.

Pregúntate ¿Qué es lo que te mueve a hacer las cosas? ¿Estás haciendo lo que haces por las razones correctas? ¿Buscas tener algo o ser alguien?